Tras meses de trabajo en el cole, los niños tienen derecho a descansar y disfrutar de unas merecidas vacaciones. Año tras año la playa continúa siendo el lugar favorito de peques y mayores para descansar y combatir los días de calor.

El buen tiempo, el ambiente más relajado y las ganas de descansar nos pueden hacer bajar la guardia de los posibles peligros que tienen el calor y el mar. Desde Erreqerre queremos recordarte unos sencillos consejos para que te diviertas con tus hijos en la playa de forma segura.

Principales consejos para disfrutar de la playa con los niños

Pasar un inocente día en la playa sin tener en cuenta los siguientes factores puede acabar en un mal día con malas consecuencias para todos:

La excesiva exposición solar puede provocar daños en la salud de adultos y niños, y no hablamos solo de quemaduras: insolaciones, vómitos, mareos, etc. Esto no quiere decir que el sol sea un enemigo a combatir, de hecho el sol es sano, y aporta vitaminas tomándolo en la cantidad justa y con las medidas de protección necesarias.

¿Cómo tomar el sol de forma segura?

• Evitar los tramos de mayor incidencia solar (entre las 12.00h y las 16.00h). Recordar que no hay que fiarse de los días nublados, porque aunque no se vea el Sol los rayos pasan las nubes.
• La protección solar es tan importante como nuestro bañador que no iríamos a la playa sin él. Para los pequeños es mejor usar protección solar con un factor alto, resistente al agua e ir renovando la crema cada 2 horas. Los bebés es aconsejable que no les incida el sol directamente.

• Además de la protección solar, no está demás poner la sombrilla para resguardarnos y usar complementos mientras están fuera del agua: camisetas, vestidos, sombreros y gafas de sol homologadas, son grandes aliados para divertirse en la arena.

Además del sol, las altas temperaturas pueden jugarnos una mala pasada si no nos mantenemos frescos y nos hidratamos. Los niños juegan y se olvidan de beber líquidos o comer, por eso, es importante ofrecerles agua, zumos frescos o frutas con un alto contenido en agua como la sandía o el melón. Si meriendan o comen mucho en la playa es mejor esperar un poco antes de volver al agua y conviene primero mojar la tripa, el pecho, las muñecas y la nuca.

¿Qué playa elegir para poder disfrutar con los niños?

Otro factor a tener en cuenta es la elección de la playa: elegir una playa limpia de basuras: cristales, latas o colillas y con arena suave mejor que de roca para evitar daños y cortes. Es conveniente también que las playas tengan socorristas y torres de vigilancia acreditados, pero cuidado, no están allí para relegar responsabilidades, los niños siempre tienen que estar bajo la visión de un adulto responsable dentro y fuera del agua.

Es fundamental que la playa cuente con señalización, como la bandera que regula el baño y enseñar a los pequeños a respetar las advertencias y las indicaciones.

Dentro del baño, explicar a los peques que las precauciones que hay que tener en el mar: el oleaje y las corrientes marinas son peligrosas y no es lo mismo el mar que la piscina.

Los más pequeños si no saben nadar pueden usar flotador o manguitos pero no son sustitutos de un mayor. Lo mejor es enseñarles a nadar, en primer lugar porque ellos mismos disfrutarán más y en segundo lugar los hinchables pueden pincharse. Y como ya hemos indicado es necesario acompañarlos en todo momento en su baño.

Tras estos consejos solo nos queda invitaros a aprovechar el buen tiempo y disfrutar en la playa. Recordar que los niños son el reflejo de sus padres y estas medidas para protegerlos debemos aplicarlas a nosotros mismos en primer lugar para dar ejemplo.

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